El impacto del COVID-19 en el sector educativo

La epidemia de Covid 19 está teniendo un impacto devastador en nuestra sociedad.  Mientras la crisis sanitaria continúa, los educadores están aprendiendo a ser resilientes y buscar oportunidades para continuar con el proceso de enseñanza y aprendizaje.  La pandemia global nos ha puesto a cuestionar la manera en que los colegios ofrecen el contenido académico y la estructura.  Lo que surja después de estos meses de aprendizaje virtual tendrá un impacto permanente en el funcionamiento de los colegios

Nunca volveremos al formato de aula de clase como un espacio físico único de aprendizaje, estamos dándonos cuenta de que el aprendizaje sucede en cualquier parte y que la casa se puede convertir en un laboratorio donde el aprendizaje es significativo.  Puedo decir que otra manera en que el contenido académico se vuelve importante es cuando se puede aplicar en el mundo real y no como un concepto dispar o algo escrito en un texto, estudiado y memorizado y luego repetido en un examen. También nos damos cuenta de que el conocimiento del contenido es un documento de fuente abierta, fácilmente disponible en un motor de búsqueda en nuestros dispositivos móviles, sin la necesidad de que sea la propiedad intelectual de un libro de texto o un maestro. Las escuelas deberán brindar acceso a comunidades de aprendizaje en red global y experiencias enriquecedoras e interpersonales en un campus físico.

El componente afectivo del aprendizaje, la respuesta emocional cuando se desarrolla un nuevo entendimiento, se encuentra en múltiples intercambios personales, informales y formales entre las personas en el día a día dentro de la escuela.  Nos damos cuenta que todo depende de la expresión en los ojos de la persona, en el tono de la voz y los mensajes que emite a través del lenguaje corporal.  El aprendizaje es una experiencia sensorial llena de sentimientos que solo se puede encontrar en la interacción con personas que comparten un espacio físico.  El colegio es un lugar para la conexión personal, para aprender a socializar, y desarrollar las destrezas para la colaboración y trabajo en equipo.  La conexión humana permite un entendimiento matizado de la vida y nos permite ver la importancia del contenido académico.  Una pantalla de computadora y una conexión de internet nunca serán capaces de replicar esta experiencia.